Como parte de los esfuerzos por visibilizar la violencia vicaría, la diputada local panista Lily Olivares presentó ante el Congreso del Estado la propuesta para establecer el 11 de mayo como Día Estatal contra la Violencia Vicaria en Nuevo León.
Por definición, la violencia vicaria es aquella que se presenta cuando uno de los padres utiliza a los hijos como instrumento para dañar a su pareja, afectando así el desarrollo de los menores y la estabilidad de las familias mexicanas.